domingo, 2 de octubre de 2011

SIRTE, CIUDAD MARTIRIZADA POR LA OTAN Y SUS ESBIRROS

No lo digo yo, lo dice en su edición del pasado jueves El País, ese periódico que ha sido uno de los que más intoxicaron para provocar esta atroz guerra de Libia. En efecto, el corresponsal de este diario ha titulado el artículo de forma harto gráfica: "NO HE VISTO GUERRA MÁS SUCIA QUE ESTA", dando la palabra (¡por fin!) a un ciudadano libio de a pie y no a uno de esos facciosos pagados por las reaccionarias monarquías del Golfo Pérsico y llamados "rebeldes" por nuestro servil colectivo de periodistas. De hecho, a lo largo del artículo se reconoce que Sirte, cuya población simpatiza mayoritariamente con el "pérfido" Gadafi, está siendo reducida a cenizas por la acción criminal de la OTAN. "Prácticamente todos los edificios grandes han sido destruidos", denunciaba un libio de origen palestino, y puntualizaba: "lo peor son los bombardeos de la OTAN, que suelen ocurrir por la noche a partir de las once. Y disparan contra cualquier edificio. Hace dos días no pararon de tirar bombas durante seis horas. He visto morir niños, mujeres, hombres... como si fueran animales. (...) En los últimos seis meses puede que hayan muerto en Sirte unas tres mil personas."

Y a todo ello hay que añadir las atrocidades de los "rebeldes" libios. La represión de estos energúmenos ha sido especialmente feroz en la ciudad de Tahuerga, a media hora de coche de Misrata. Allí la población es también mayoritariamente pro Gadafi y las huestes integristas aliadas de la OTAN los están literalmente masacrando. "A quienes son negros y de Tahuerga, directamente los matan", dijo un huido de los bombardeos de Sirte a El País. Como justificación los mercenarios pro OTAN han aludido al hecho de que los habitantes de este pueblo combatieron en Misrata al lado de Gadafi, donde según ellos, se dedicaron a las violaciones masivas de mujeres.

De nuevo, nos encontramos aquí con la acusación de violaciones masivas, algo que también fue usado hace unos meses y resultó ser pura propaganda de guerra. Y ahora se nos dice que hay filmaciones de violaciones... ¡Pues mucho está tardando Al-Jazeera y sus compiches de los media occidentales en mostrarlas! El caso es que hasta el propio periodista de El País lo pone en duda cuando afirma "que existan o no esos vídeos ya casi es lo de menos (...). Lo peor es que el odio ya se ha disparado y cualquier rumor sirve para justificarlo". Curiosa afirmación la de este medio que precisamente tanto ha contribuido a ese odio. ¿Por qué ahora no nos hace pasar por información la propaganda intoxicadora de los "rebeldes"? ¿Por un repentino ataque de honestidad? La verdad: no creo en los milagros.



Terrorismo otánico: bombas de fragmentación

sobre la ciudad libia de Brega.





Más terrorismo otánico: bomba de la OTAN
en una autopista libia
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