sábado, 7 de julio de 2012

EL ORIGEN DE LA DEUDA PÚBLICA GRIEGA Y RAZONES PARA NO PAGARLA

Leonidas Vatikiotis
CADTM, 30/10/2011




Ponencia de Leonidas Vatikiotis en el encuentro “Viviendo en deudocracia”, Quién debe a Quién, Madrid, 7 y 8 de octubre de 2011.

El gobierno de George Papandréu (quien es considerado por los griegos como un colaboracionista, siendo la persona más odiada) desde el primer día de su elección ha estado diciendo que la deuda pública ha alcanzado los niveles actuales debido a un generoso Estado del Bienestar. El objetivo de esta gran mentira era que la ciudadanía griega aceptara la quimioterapia del Fondo Monetario Internacional (FMI) y la Unión Europea (UE) sin reacciones sociales.

Por el contrario, nosotros intentamos demostrar que la mayor parte de la deuda griega ha sido creada por la clase dirigente y no por la gente que sufre ahora las medidas de austeridad impuestas por el FMI y la UE.

En particular, la deuda griega y el alto déficit presupuestario fueron causados por los siguientes hechos:

1. Recesión. Como ha ocurrido en todo el mundo, la recesión ha provocado una bajada de ingresos fiscales y un incremento del déficit.

2. Adicción de los capitalistas griegos a las subvenciones del Estado. Desde la década de los 80 (cuando el gobierno griego actuaba como una compañía de seguros, compensando a todos los capitalistas griegos por sus pérdidas por la crisis) hasta la actualidad, las élites dominantes han sido las mayores beneficiarias del presupuesto del Estado. Del mismo modo que no podemos imaginar la élite económica italiana sin los ingresos provenientes de la Mafia, o las élites alemana y británica sin las ganancias del extranjero, tampoco se puede concebir la élite dominante griega sin las subvenciones estatales.

3. Enorme gasto militar. Por la amenaza real procedente de Turquía, pero en mayor medida por su participación en coaliciones imperialistas, como la OTAN, Grecia destina una gran parte de su presupuesto al gasto militar. En Europa, únicamente Alemania gasta más parte del PIB en armas que Grecia.

4. Participación de Grecia a la CEE en 1981 y en la eurozona en 2001. Las raíces del déficit presupuestario se tienen que buscar en el colapso de la industria griega debido al mercado común. Más tarde, la Política Agrícola Común y la participación en la eurozona han llevado al extremo las contradicciones de l’economía griega. Los déficits de Grecia y el resto de países periféricos de la eurozona son la otra cara de los superávits de los países no periféricos.

5. Evasión oficial de impuestos de la clase dominante. A menudo se comenta que Grecia produce tres cosas: Iglesia Ortodoxa, que es la mayor terrateniente; barcos, porque Grecia participa de una buena parte del comercio mundial; y bancos. Ninguna de estas “entidades” paga impuestos. Por medios oficiales han sido excluidas del sistema tributario (sólo los propietarios de barcos han blindado la evasión fiscal mediante 56 leyes constitucionales).

6. Gran parte del gasto se destina al pago de las tasas de interés. Según el presupuesto de 2012, se pagará por los intereses un 8.3 % del PIB (en 2011, un 7.4 %). Incluso las economías más estables, con el tiempo, se colapsarían si tuvieran que pagar estas cantidades a los acreedores.

Todos estos argumentos nos dan una sólida base para contraatacar e intentar parar las agresiones a nuestros derechos sociales y políticos

En Grecia nosotros decimos “no debemos, no pagamos”, como vosotros. Pero también añadimos “no vendemos”, porque en Grecia se está llevando a cabo el mayor plan de privatizaciones de toda Europa favorecido por la Troika, que es como llamamos al grupo de expertos del FMI, la UE y el Banco Central Europeo (BCE). En este contexto, el equipo de Debtocracy está dando los primeros pasos para hacer un segundo documental que analizará el tema de las privatizaciones.

En concreto, exigimos no pagar la deuda pública por las siguientes 8 razones:

1. Gran parte de la deuda griega es fruto de la corrupción. Como ejemplo podemos decir que nadie sabe todavía el coste real de los Juegos Olímpicos de 2004. Pagamos por el sistema de seguridad (el denominado C4I) 1.200 millones d’euros, pese a que nunca lo recibimos.

2. Desde la década de los 90 cuando España, Irlanda, Portugal, Italia y Grecia querían pedir dinero prestado para financiar sus necesidades, los mercados les prestaban dinero a unos tipos de interés 2, 3 e incluso 4 veces más elevados del que lo hacían a países como Alemania y Estados Unidos. La excusa oficial para esta extorsión, para esta especulación, era que estos países tenían un riesgo muy alto de quiebra. Ahora, nosotros argumentamos que ha llegado el momento de pagar el precio por esos altos rendimientos de la inversión. En esencia, no tendrían que haber costes adicionales, porque ya los hemos pagado en forma de altos tipos de interés.

3. Cómo hemos visto en el informe de la auditoría de Irlanda, una gran parte de estos bonos han sido comprados por hedge funds (fondos de alto riesgo) y por especuladores. Lo mismo ha pasado con la deuda griega. En un análisis reciente en el New York Times se decía que desde el acuerdo firmado durante la cumbre de la UE de julio, un tercio de los bonos griegos han sido comprados por especuladores. Entonces, no hay obligación moral de acatar esa deuda.

4. Gran parte de esta deuda está en manos de bancos que han sido salvados con dinero del pueblo griego. El primer préstamo de rescate a Grecia era de 110.000 millones de euros y, hasta ahora, los bancos han cogido 108.000 millones del gobierno, tanto en forma de avales como en líquido. Pero estos bancos, los bancos griegos que continúan vivos gracias al dinero del pueblo griego, poseen el 30-40% de la deuda. Por esta razón exigimos la nacionalización de los bancos griegos para abolir o reducir la deuda.

5. Exigimos no pagar esta deuda porque es inaceptable que en el siglo XXI los bancos impongan a la gente un genocidio como castigo para pagar la deuda. En Grecia, actualmente se está produciendo un genocidio social. Este año se van a cerrar 1.054 escuelas. Tengo que decir que desde la creación del Estado griego el 1820 nunca se había cerrado ninguna escuela. También se han cerrado 54 hospitales y decenas de departamentos de universidades. Centenares de jóvenes griegos y griegas dejan Grecia cada mes para ir a trabajar al Reino Unido, Estados Unidos, Australia y Canadá, como pasaba en el primer periodo de posguerra. Esta es la actual tragedia griega.

6. Exigimos no pagar esta deuda porque ya la hemos pagado una y otra vez. En Grecia, y pienso que en la mayor parte de los países del hemisferio norte, si un prestamista va a los tribunales diciendo que yo le he pagado el 130 o 150 % de mi deuda con él, los tribunales le dirían que renunciara al resto de la deuda. Exactamente lo mismo exigimos para la deuda soberana.

7. Pedimos no reembolsar el primer préstamo de 110.000 millones de euros de la Troika (de los cuales solamente se han recibido 65.000) porque el acuerdo para aprobarlo no ha sido votado por el parlamento griego, como tendría que haber ocurrido de acuerdo con la Constitución. El gobierno de Papandréu no dejó que se votara porque sabía que no tenía la mayoría cualificada que pide la Constitución en estos casos. Este acuerdo es ilegítimo y, por lo tanto, no tenemos la obligación de devolver el dinero.

8. Creemos que no debemos pagar la deuda porque se ha demostrado que el mayor incremento de la deuda pública se ha producido a partir del rescate de Grecia. En octubre de 2009, cuando fue elegido el gobierno socialdemócrata del PASOK, la deuda pública era del 115 % del PIB. En 2012, de acuerdo con estimaciones del FMI publicadas hace unas pocas semanas, la deuda pública se incrementará hasta el 189 % del PIB. Nosotros pensamos que el alto nivel de deuda es una buena excusa para imponer el más sangrante programa d’austeridad, el mayor programa de redistribución de la riqueza social tras la Segunda Guerra Mundial

¿Cómo podemos lograr nuestro objetivo, que es no pagar la deuda o solamente pagar una pequeña parte?

La manera más sencilla que tenemos para hacerlo, instruyendo la población y siendo compatible con la legislación nacional e internacional, es formar una comisión de auditoría de la deuda.

Esto exactamente es lo que hemos hecho en Atenas, dejando claro desde el primer momento que no pedíamos una comisión de investigación del parlamento. En este momento se ha creado una comisión ciudadana para la auditoría con la participación de centenares de personas corrientes, economistas y abogados para demostrar a la ciudadanía, a la prensa y a la clase política, que esta deuda no debe ser pagada. En esta línea, hemos formado cerca de 20 grupos por examinar las diferentes caras de la deuda pública. Creemos que en breve obtendremos los primeros resultados.

¿Por qué decimos no a la reestructuración de la deuda propuesta por Alemania?

1. Porque se acompaña de nuevas medidas de austeridad y planes de privatizaciones.

2. Porque pretende dar a Grecia el formato de Zona Económica Especial, donde las empresas alemanas no pagarían impuestos y las leyes laborales no serían válidas, como ocurre a las maquiladoras de Guatemala, Honduras y México.

3. Los nuevos bonos no serán emitidos bajo la legislación griega, como los actuales, sino bajo el derecho internacional.

Sé muy bien que nuestra lucha es como una gota de agua en el Mediterráneo. Pero también se muy bien que el momento más oscuro del día es justo unos minutos antes del alba.

Traducido por Pau Sanz

Leonidas Vatikiotis es periodista especializado en economía, miembro de la Comisión para la auditoría de la deuda pública griega y responsable de la investigación científica del documental Debtocracy. leovat@yahoo.com